A nombre del Sindicato Único del Personal Académico de la UAQ y en calidad de Secretaria General, hago uso de la voz, no para pedir, sino para EXIGIR a Saúl García que cese en su hostilidad discursiva hacia nuestro gremio y hacia nuestra Universidad.
Esto porque, haciendo uso de panfletos y diatribas, pretende, él y los intereses que representa, ganar la legitimidad que entre la comunidad docente no tiene, ni tendrá. Dichos actos no solo descalifican sin fundamento, sino que están encaminados a lesionar el estatus de la Universidad en general y del Sindicato en particular. Lo cual constituye un claro atentado a la Educación Pública y a los derechos laborales, porque al hacerlo le brinda herramientas a los adversarios políticos que, hoy en día, no tienen dudas en buscar acortar la viabilidad de nuestra Institución. Saúl García: tus descalificativos públicos infundados constituyen un agravio para la UAQ y para el SUPAUAQ y se ponen en concordancia con las voces que argumentan que la universidad pública y los sindicatos no deberían existir.
Estimados compañeros y consejeros, que no quepa duda que en el SUPAUAQ vamos a defender a toda costa y hasta sus últimas consecuencias a nuestro gremio, nuestros derechos laborales conquistados y la viabilidad de la institución de la que dependemos. No permitiremos que se cumpla el adagio que afirma que una mentira repetida mil veces termina siendo verdad.
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