Editorial

Una vez más, se hace necesario defender con denuedo el derecho que tiene todo mexicano a la Educación Superior Pública. Esto ante la falta de reconocimiento que tanto el Gobierno Federal, como el Estatal y el Municipal, le otorgan el carácter estratégico que representa para el desarrollo del país.

Ante el avance de la participación de empresarios metidos a educadores con la consiguiente mercantilización de la enseñanza y la discriminación y la exclusión social inherente, y del crecimiento de las universidades patito que abaten la calidad del conocimiento, y que se ostentan con un marcado sello confesional, en el SUPAUAQ se mantiene el objetivo de conservar la calidad y pertinencia que poseen los planes y los programas que se imparten en las distintas escuelas y facultades de la UAQ. Mantiene, también la bandera de la autonomía universitaria; de las formas democráticas de gobierno y de su carácter laico, así como el respeto a lo que se pactó en el contrato colectivo de trabajo.

Estamos convencidos de que el estado tiene la obligación de salvaguardar permanentemente la Educación Superior Pública y de otorgar los recursos que requiere, en cantidad suficiente y en forma oportuna, para su funcionamiento y para que cumpla su obligación de formar profesionistas capaces de llevar al país a los niveles de desarrollo que nuestra juventud merece.

Atentamente

“Por una autentica comunidad universitaria”

M. en A. Marco Antonio Rubio Abonce
Secretario General