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RINCÓN
DE LA LECTURA
GANADOR DEL
LIBRO "ENSAYO SOBRE LA LUCIDEZ"
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Dr. Tomás Vázquez
Arellano
Maestro adscrito a la Escuela de Bachilleres, Plantel Norte.
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EDUCACIÓN EN MÉXICO
Respecto a la materia “Historia de la Filosofía
II, impartida en el Plantel Norte, es de reconocerse la pertenencia
y el esmero para organizar y llevar a cabo los diferentes cursos
recuperatorios o, también llamados, cursos de verano. Se
implementaron, sin duda para bien de los alumnos preparatorianos
y, seguramente, con el afán de contribuir, de algún
modo, a la elevación de la calidad académica, para
dar solución, de algún modo, a los problemas de reprobación
y deserción en el nivel de la educación media superior
que se presenta en nuestro país.
Para emitir la presente observación, no
solo me baso en mi experiencia de enseñanza y práctica
filosófica, sino en la voz y experiencia de los propios alumnos.
He aquí, algunos de sus puntos de vista:
“PROS”.
“Pienso que debe haber talleres porque, de
alguna manera, representa una gran oportunidad para algunos alumnos
que realizan un gran esfuerzo durante el semestre normal y por alguna
razón no pudieron salvar todas las materias, pues es algo
pesado, ya que algunas son un tanto difíciles y tal vez por
ir bien es éstas descuidamos las demás o, en algunos
casos, con los maestros que imparten determinadas clases es preferible
darse de baja a tener una NA”.
“Bueno,
en mi caso personal me pareció y me parece buena la idea
del taller ya que, como me voy a otro Estado a estudiar necesitaba
pagar la materia de Historia de la Filosofía II y presentar
un extemporáneo de otra metería. De esa manera es
más fácil ya que, de dos extemporáneos, presentaré
uno y me enfocaré más al estudio de matemáticas”.
“La razón suficiente simplemente es
porque tenemos que aprobar la materia y si bien es cierto que hay
más opciones, como el examen extemporáneo, yo le veo
mayor ventaja a volver a tomar la metería en un curso de
verano puesto que, tomando la opción del examen extemporáneo,
nos da cierto grado de temor y si no lo pasamos llega a afectar
nuestro promedio general”.
“Este tipo de talleres de regularización
sí deben realizarse, ya que es una manera más sencilla
de cursar la materia, ya que el examen extraordinario también
puede ser otra opción, pero hay casos donde alumnos se dieron
de baja y para realizar un examen de esos es mucho más complicado,
ya que no se tiene idea de los que se llevaron en el curso. Además,
llevando taller es mucho mejor ya que aprendes en todo el curso
y en el examen se estudia sólo para el examen”.
“Mi razón suficiente tal vez no lo
sea tanto, al menos lo pienso por mi y no por los que salen de sexto
semestre, pues creo que para ellos sí fue muy bueno el taller,
pues así no pierden un año, pero creo que sólo
debió venir quien quisiera y lo considerara necesario”.
“CONTRAS”.
“Tal vez una razón suficiente sería
porque muchos chavos se confían y tal vez no le echan las
ganas que deberían, pensando que siempre hay otra oportunidad
y creen que todo lo van a resolver cursando un taller”.
“Sería, más que nada, por el
simple hecho de reconocer nuestro error que solamente nosotros y
nadie más tuvo la culpa de no haber pasado la materia y,
por lo tanto, nosotros somos responsables de nuestro actos y las
consecuencias que éstos ocasionan”.
“La idea contraria sería que, en nuestro
caso, perdemos en vano, pues el cobro de los talleres nos quita
algunas cosas que podríamos tener o porque, a veces, en ocasiones,
son nuestros padres los que nos los pagan y no hay derecho, pues
tuvimos todo un semestre para pagar las materias y así no
hay derecho también para ocasionarles a nuestro padres que
hagan un gasto innecesario en nosotros”.
“No deberían de existir estos talleres
ya que en todo el semestre hay tiempo suficiente para percibir el
conocimiento y poder aprobar la materia, además de que en
este tipo de talleres creo yo que se forman alumnos conformistas
en el sentido de que, si no aprueban, pueden cursar un taller.
“Para los que aún nos falta algún
tiempo para salir, no me agrada la idea de que nos “limiten/
nuestras “vacaciones” pues bien los pudimos cursar en
el transcurso del semestre, además de que, tanto el personal
administrativo como los maestros, tienen que trabajar extra, aparte
de lo que regularmente trabajan durante el semestre. En conclusión,
creo que sólo era buena idea para los de sexto semestre y
para todos los demás, no”.
Como se observa, la evaluación general del
curso, la constituyen las anteriores líneas. De acuerdo con
el acta de calificaciones, el promedio general del grupo fue de
8.56, el número de acreditados fue de 25 y el número
de reprobados 0. Para la acreditación se tomaron en cuenta
los siguientes criterios: asistencias, diversas participaciones,
tareas individuales, por parejas y en equipos, debates y exámenes.
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