"Uno de mis principales motivos es venir a convocar e invitar a los estudiantes y maestros de arte para conocer cómo está el arte en Querétaro. Busco darle movimiento a toda producción artística, abrir la posibilidad de conocernos mejor en México."

 

Flores Esquivel junto a su obra "El sanador", la cual dió origen al resto de las pinturas que forman parte de la exposición. Esta obra, cuenta el pintor, está inspirada en todas las personas que se han dedicado a curar y atender a quienes más lo necesitan.

¿Cómo fue su primer acercamiento a la pintura?

Fue alegre mi primer contacto con la pintura y el arte siempre me llamó la atención. Conocí la pintura a los cinco años y desde entonces estoy continuamente buscando la manera de expresar la realidad a través del arte desde mi propia percepción y desde afuera hacia adentro. El arte siempre ha ayudado a los avances de la humanidad, para vernos reflejados con mejor certeza.

¿Qué representa “La Victoria de un Libertario”?

“La Victoria de un Libertario” más que un discurso intelectual es un discurso existencial. El sentido de la vida es adquirir la conciencia, adquirir el conocimiento con todos los factores que hacen que la vida sea reconocida como un valor. Y uno de los valores principales sería la libertad, otro el respeto. La Victoria de un Libertario me habla de la búsqueda de los valores que nos sustentan. Mi trabajo tiene una intención abstracta de situaciones concretas. Un libertario es aquel que se afana, que se disciplina, que se ordena a sí mismo llegar a metas determinadas, ponerse a prueba constantemente y dispuesto a resolver, a tener certeza de que el poco o mucho tiempo que tengamos para habitar este planeta lo hagamos mayormente felices, con la intención de que a nuestro alrededor también impere una armonía.

¿Qué quiso decir con la frase “Ser libertario es empeñar nuestra vida por el otro, lo más valioso es aquello que se conquista para compartir”?

Es darse cuenta que existe el otro, que podamos coincidir y hacer de esta vida una aventura; formamos parte de un grupo de energía humana que busca propósitos verdaderos, busca la aplicación de la voluntad propia conjugada con la de otros, para enriquecer a muchos más haciendo lo que se hace, dándole la porción de vida que puede dar uno de sí mismo, creando un concierto bien estructurado y encontrar en esta obra plenitud.

Esta es una muestra de mi experiencia en mi oficio como pintor.

Todos somos libertarios cuando tomamos la conciencia de quiénes somos. Yo pretendo ser un libertario, en mi conciencia, en mi oficio, en mi intención, en mi propósito; solo es cuestión de que nos demos cuenta de que manera lo estamos siendo, de qué manera lo podemos ser.

¿Cómo se siente al iniciar una pintura?

Tengo oportunidad de volver a vivir, de volver al principio, de cero al infinito.

Ese es el propósito del artista: Fluir, avanzar, tener vitalidad para moverse, descubrirse a sí mismo, encontrarse ejerciendo su alegría. Las pinturas son un reflejo de lo que siento y pienso en virtud de la observación que tuve de un hecho, la dicha que tuve en un momento determinado cuando percibí a seres humanos en armonía, también en desarmonía. Uno es como un registro constante de hechos y dichos.

Lo importante en este tiempo es promover más la idea de unidad, de unir propósitos viables. Necesitamos un acto humano de humildad. Si no nos unimos esto va a terminar en caos. Estamos en el filo de un tiempo determinante para México, y lo mejor es que nos unamos. Así vamos a ver el sol mejor, a respirar tranquilidad. Poder decir que la vida tiene todo para vivirla.

¿Para usted el arte  y la pintura es una manera de unir a las personas?

Sí, pienso que a través del arte puede haber una forma de sensibilizar lo que se ha endurecido en cuanto al entendimiento del sentido de la vida. A través del arte se pueden fortalecer ideas que han sido olvidadas o mal empleadas. El arte corrige, el arte instaura, restaura, reconstruye. Con arte se fluye, rompe inercias, rompe hasta estructuras falsas para construir nuevas y más consistentes. 

Concluyo diciendo que mi trabajo aquí es otra oportunidad de encuentro.

Me interesa saber las opiniones de los jóvenes; la computadora no lo es todo, es solo una parte de nuestra inteligencia como humanos, no la usen como si fuera la forma de obtener el conocimiento. El conocimiento es observar, el método científico no termina diciendo “la biblia es la verdad”, la verdad no existe mientras uno no la pueda comprobar, mientras no la pueda poner a prueba con su propia vida. Poner a prueba nuestra vida es sumergirnos en el esfuerzo que implica trazar propósitos, metas y esforzarse por llegar a ellas, compartiendo lo conocido y aún lo desconocido que haga de nosotros seres humanos, no máquinas, no objetos.

Ese es mi propósito, lo que me mueve y me da energía suficiente para seguir intentando siempre con la esperanza de que podemos ser mejores humanos y vivir mejor.

La exposición estará hasta el jueves 28 de febrero, se llevará a cabo una plática ese mismo día en la planta baja del SUPAUAQ. Me pongo a disposición de quienes acudan para responder preguntas con todo el ánimo de compartir.